domingo, 10 de enero de 2016

NEAL ASCHERSON (1932-)

Neal Ascherson no es un historiador profesional, sino un reputado periodista y ensayista británico (él diría escocés). Es cierto que estudió Historia en el King's College, en donde Hobsbawm, que fue su tutor, lo calificó como «quizás el estudiante más brillante que jamás he tenido» (Wikipedia dixit). Pese a sus brillantes calificaciones, Ascherson no optó por la carrera académica, algo que quizás debamos agradecer, porque eso le convirtió en un magnífico divulgador y no le restó en absoluto competencia profesional.
En español sólo hay traducido un libro suyo, lo que es una pena, porque su revisión sobre Escocia (Stone Voices, 2002), tiene una pinta magnífica, así como sus obras sobre Polonia, país que conoce bien. Pero su El Mar Negro (1995) compensa algo este desconocimiento suyo en España, porque es un libro insuperable, extraordinario, en donde la Historia se escribe con las mayúsculas que impone la civilización —no la historia social, la microhistoria, la historia de la vida cotidiana y otras zarandajas— y que te lleva a ese lejano y exótico apéndice del Mediterráneo en donde todo empieza y todo acaba, y lo hace desde los tiempos más remotos hasta los actuales. Lástima que no se incluyan las recientes aventuras expansionistas de la Rusia de Putin.

(1987)
¿Estudiante?
(2015)